jueves, 5 de septiembre de 2013

¿"IDOLS"... SIN CENSURA?

Desde el punto de vista occidental (donde la mayoría de nosotros observamos y criticamos a los asiáticos), una "idol" debería seguir las reglas del juego (es decir, apegarse a los principios del "Kiyoku", "Tadashiku", y "Utsukushiku") "impuestas" por los "hipócritas" que manejan los hilos del género artístico "idol" en Japón, para mantener su imagen intacta, limpia, inmaculada, sin ninguna mancha visible. Y debería abstenerse de caer en tentaciones, vicios y malas influencias, y por supuesto, abstenerse de vestir inapropiadamente y de aparecer desnuda, en bikini, lencería o ropa interior, en los medios de comunicación (que impliquen fotografía y/o grabación de vídeo).
Sucede que, en nuestra sociedad, el "eurocentrismo" es algo así como la visión homogénea para interpretar el mundo. En realidad, las religiones, llámese cristianismo, islamismo, judaísmo, budismo, confucianismo o mazdeísmo, nos siguen dominando a nosotros hoy, como en los tiempos medievales (antes de la "era de la ilustración").
Para un cristiano (y me refiero a TODAS las sectas cristianas), el cuerpo humano es "impuro", la desnudez se asocia con vergüenza y desgracia (entre muchas connotaciones negativas que se relacionan con el cuerpo), y por lo tanto debe ser cubierta, escondida. Esta asociación es aprendida de generación en generación, es como un círculo vicioso que nos aparta de lo que REALMENTE queremos conocer como seres humanos que vivimos en este mundo. Y nosotros padecemos por ello en nuestros países.
Irónicamente, en la Biblia (específicamente en el relato de la creación del mundo que encontramos en el libro del Genesis) encontramos que DIOS creó al hombre "puro", a su imagen y semejanza. Es decir, el ser humano es "puro" desde el momento de su nacimiento (incluyendo al cuerpo humano), por lo que se posee una profunda reverencia hacia la naturaleza, a la manera de los monjes budistas; por cierto, esta concepción, que se opone a la del cristianismo en todo el sentido de la palabra, es expresada desde el punto de vista de un japonés.
En el caso de las "idols", su comportamiento debe ser "perfecto" (en términos de lo que se espera en la perfección de una adolescente de su edad), pues de ella misma se espera simpatía, calidez y candidez (o en otras palabras, sencillez, ingenuidad y bondad). Además, se busca perfección en lo ético y en lo estético, y que sea capaz de expresar adecuadamente las características del género (aunque tenga los rasgos comunes de cualquier chica normal). No sé si será por esto, que existen las reglas de "permanecer virgen, soltera y sin compromisos", de "mantenerse lejos de los vicios y las drogas" y de "abstenerse de comportamientos inapropiados" en el "MONOPOLIO IDOL".
Para los japoneses, que no se escandalizan ante cualquier "photobook" o fotografía de una chica en bikini o ropa interior (con tal de que no sea pornografía o promiscuidad de ningún tipo), el concepto de "pureza" se asocia con el de "belleza", lo que les da a las chicas motivos de sobra para todo lo que se llama "orgullo", sin ningún sentimiento de culpa.
Y LOS LÍMITES SÍ EXISTEN DENTRO DEL GÉNERO. La perfección debe ser acorde a lo que se espera de la perfección en la etapa de crecimiento de una "idol". Cuando su carrera (su etapa "idol") termina, la chica pasa a ser artista con talento, que si tiene una trayectoria ejemplar sigue gozando de admiración y respeto. La idea es, hacer todo perfecta y puramente, de acuerdo al estatus que posee la "idol".


#69: "SANTAS ÍDOLOS, BATMAN"
(Fuente: www.wota.tv; por respeto a nuestros clientes, hemos decidido abstenernos de mostrar fotografías y/o vídeos de ninguna índole)

No hay comentarios.:

Publicar un comentario